Redacción central/Motores Bolivianos
Mazda ha anunciado importantes desarrollos en su estrategia automotriz, confirmando el lanzamiento de un nuevo motor Skyactiv-Z y una próxima generación de la CX-5. Este anuncio marca la transiciónde la marca hacia la electrificación, prevista para el período entre 2025 y 2027, como parte de su plan Fase 2.
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La nueva versión de la CX-5 incluirá un tren motriz híbrido desarrollado internamente, diferenciándose de la CX-50 Hybrid, que utiliza tecnología de Toyota. Esta estrategia busca reducir costos y simplificar la línea de productos, con un enfoque en la reducción de complejidad del 60% respecto al modelo actual. Esto implica una oferta de variantes más compacta y menos diversa, en contraste con los ocho acabados que se comercializan en Estados Unidos.

En 2027, Mazda también introducirá un vehículo eléctrico basado en una plataforma exclusiva, y se evalúa la incorporación de variantes híbridas enchufables, que se desarrollarán de forma económica gracias a la infraestructura compartida. Esto se alinea con la previsión de la marca ante una adopción de vehículos eléctricos que podría no ser tan rápida como se esperaba.

El motor Skyactiv-Z, que verá la luz en 2027, es un cuatro cilindros que sucederá a los motores Skyactiv-G y Skyactiv-X. Utilizará un método de combustión lambda uno, diseñado para lograr una alta eficiencia térmica mediante combustión ultradelgada en un amplio rango de revoluciones. Mazda busca así optimizar el rendimiento ambiental y de conducción, además de simplificar su línea de motores de combustión interna. Esta tecnología también se aplicará en el futuro a sus motores de seis cilindros en línea.
El plan Fase 3, que se desplegará entre 2028 y 2030, marcará el inicio de un lanzamiento a gran escala de vehículos eléctricos por parte de la firma de Hiroshima.